3 de agosto: Ahmad el Moghrabi, de 21 años, sin carnet de conducir, fue inculpado por conducir como un demente por la ciudad de Malmö, por lo que casi mata a una madre y a su bebé. El 11 de febrero, El Moghrabi conducía un lujoso Mercedes a gran velocidad, con otros pasajeros árabes, de los cuales uno es un conocido extremista, cuando la Policía intentó detener el coche. En vez de pararse, se dio a la fuga a unos 150 kilómetros por hora en la concurrida calle de Amiralsgatan, donde el límite de velocidad es de 40 kilómetros por hora.
La persecución policial terminó cuando El Moghrabi chocó contra unos coches aparcados. Tres personas resultaron heridas, y la madre y el bebé sufrieron lesiones que hicieron peligrar sus vidas tras haber sido apresados entre los coches.
El Moghrabi se dio a la fuga, pero fue atrapado más tarde. Fue acusado de negligencia grave, provocar lesiones físicas graves, huir del lugar del accidente y conducir sin permiso. Su explicación de su conducta vandálica fue que no quería que la Policía lo atrapara, ya que le habían retirado el permiso de conducir.
3 de agosto: se informó de que 2.000 inmigrantes del Tercer Mundo están solicitando asilo a Suecia cada semana. Los grupos más numerosos es el de los sirios, y después el de los afganos, el de los apátridas, el de los eritreos y el de los somalíes. El Servicio de Inmigración informa ahora de que hay cerca de 50.000 solicitantes de asilo viviendo en diferentes centros de alojamiento y alquiler, y que hay más de camino hacia un país que ya sufre una importante escasez de viviendas.
La pregunta es: ¿dónde van a vivir? Ahora hay cada vez más gente preocupada por que el Gobierno confisque las casas de los suecos y se las dé a los solicitantes de asilo. En 1992, la "Comisión de Evaluación de Riesgos y Amenazas" (Hot- och riskutredningen) estableció que el Gobierno debía tener la opción de confiscar propiedades a los suecos, especialmente residencias de verano, en tiempos de crisis. A principios de septiembre, la columnista Anna Dahlberg, de Expressen, uno de los principales diarios de Suecia, urgió a los suecos a que hicieran "sitio" y entregaran "las llaves de sus apartamentos a los más necesitados".
3 de agosto: se produce otro tiroteo en la ciudad de Malmö, ya afectada por la violencia. Nadie resultó herido esta vez, pero la Policía encontró cartuchos de proyectiles en la calle Rasmusgatan, en el área de Seved, una de las zonas vedadas de Malmö, donde la mayoría de los habitantes es de origen extranjero. El área es conocida por su abierto tráfico de drogas, y durante los últimos años ha habido allí un gran número de tiroteos y ataques con granadas. (El 12 de junio arrojaron una granada de mano y cuatro personas resultaron heridas). Para intentar reducir la tasa de criminalidad, las autoridades locales dieron permiso a la Policía el 12 de agosto para instalar cuatro cámaras en la zona para grabar los acontecimientos durante las 24 horas del día.
5 de agosto: el Departamento de Policía de Estocolmo causó revuelo por un impactante artículo sobre la vida cotidiana en los barrios periféricos que tienen gran concentración de población inmigrante, como Tensta-Rinkeby, Hjulsta, Kista y Husby. Las pandillas juveniles atacan a menudo a la Policía utilizando punteros láser para cegar a los agentes, así como tirándoles piedras y bombas incendiarias. Las bandas de delincuentes resuelven sus conflictos disparándose en lugares públicos, poniendo en peligro la vida de personas inocentes que puedan interponerse en su camino. La agente de policía Nikolina Bucht escribió en una columna en el diario Svenska Dagbladet que ha llegado el momento de "recuperar la zona de manos de los delincuentes y proteger a todas las personas respetables a las que les han destruido sus barrios, les han incendiado sus coches y se sienten inseguras". Escribió:
"La semana pasada mis compañeros recibieron una llamada por un paro cardiaco en Rinkeby. (...) Cuando llegaron al lugar, se encontraron con unos diez jóvenes que se sintieron provocados por su mera presencia, se volvieron agresivos y se enmascararon. La Policía tuvo que concentrarse en las piedras que les caían en vez de subir al apartamento y realizar la RCP. El hombre tuvo que esperar siete minutos más a recibir ayuda, un tiempo que podría haber salvado su vida. Este no es un hecho aislado".
7 de agosto: un refugiado somalí, Mohamed Husein, se quejó de que aún no se le había concedido la ciudadanía sueca. Los somalíes deben esperar tres años más que otros a que se les conceda, ya que no pueden demostrar su identidad. Husein quiere un pasaporte sueco para volver al país del que dice haber escapado, "a visitar a su madre y a hacer algunos contactos de negocios".
10 de agosto: se informó de que una chica de 15 años embarazada, que había viajado seis semanas antes con su novio a Siria, había sido capturada por el Estado Islámico (ISIS). Cómo logró la muchacha viajar sin pasaporte o documentos identificativos sigue siendo un misterio. Los medios suecos no hicieron ningún esfuerzo por averiguar por qué la chica podría poner reparos a vivir con el ISIS. Se sabe que su novio se ha unido a un grupo afiliado a Al Qaeda.
11 de agosto: la publicación jurídica Dagens Juridik informó de que una chica de 19 años había sido puesta bajo custodia, en virtud de la LVU ("Ley con disposiciones especiales sobre el cuidado de los jóvenes"), después de que su familia la hubiese amenazado con someterla a violencia por motivos de honor. Los empleados de los servicios sociales en la isla de Gotland pidieron "atención administrada" después de que la muchacha, pese a las amenazas, hubiese escapado del centro de acogida donde estaba viviendo y se volviera a vivir con su familia. El tribunal dictaminó que la investigación demostraba que el deseo de regresar de la chica radica en su educación, que le ha enseñado que el honor de la familia es más importante que sus derechos individuales. También podría sentirse culpable, porque cree que está deshonrando a la familia al no estar junto a ella. Según el tribunal, la conducta de la joven debebería considerarse un caso "socialmente conflictivo" de acuerdo con la definición de la LVU y, por tanto, necesita protección.
14 de agosto: dos hombres de 21 y 26 años fueron detenidos como sospechosos de dos de los muchos ataques recientes con granadas de mano en Malmö. Mientras, otro hombre de 26 años fue detenido por intento de asesinato y posesión ilegal de armas. Ambos sucesos se produjeron en Rasmusgatan, en Seved, la zona vedada de Malmö.
A primeras horas de esa mañana, la Policía descubrió también dos granadas de mano en Adelgatan, en el centro de Malmö. Una había explotado, y la otra había fallado. Se cercó una amplia zona con barreras y hubo que evacuar varios edificios. La Policía sospechaba que el incidente podría guardar relación con un coche bomba que había sido detonado en Malmö dos días antes. Malmö ha sufrido el mayor número de ataques con bomba de todas las ciudades escandinavas: solo este año se han producido veinte.
12 de agosto: un ciudadano iraní de 43 años, Ramin Sayadi, fue sentenciado a cuatro años de cárcel por tres violaciones y dos delitos de acoso sexual a jóvenes. Sayadi también vendió a las chicas grandes cantidades de narcóticos de prescripción médica, como Tramadol, Ritalin y Subutex. La investigación policial demostró que tenía cerca de 1.000 clientes. Cuando las chicas se volvieron adictas a los fármacos, se aprovechó de ellas sexualmente. La Policía cree que hay muchas más víctimas que no han denunciado. El inspector detective Jan-Åke Stendahl declaró al diario Göteborgs-Posten que este hombre tenía más de 200 contactos en su móvil, y que la mayoría de los números correspondía a chicas jóvenes. Sayadi fue capturado en mayo del año pasado, cuando daba vueltas por la estación central de Gotemburgo en busca de clientes.
A pesar de su sistemática actividad criminal, solo ha sido condenado a cuatro años de cárcel, y no tendrá que enfrentarse a la deportación.
14 de agosto: un niño condiderado refugiado sin acompañantes fue procesado tras ser acusado de violación. Los hechos tuvieron lugar la noche del 10 de enero, en una residencia juvenil en Västerbotten, en el norte de Suecia. El sospechoso es de origen afgano y dice tener 17 años. La Policía cree que violó a la mujer cuando se hallaba en estado de embriaguez, y por tanto en lo que la ley llama "una situación de especial vulnerabilidad".
17 de agosto: la Policía emitió una orden de arresto internacional contra un ciudadano congoleño, Loran Guy Mogi, de 23 años, buscado por el asesinato de su exnovia, Therese Eriksson, de 23 años y de Vårgårda. Eriksson había sido hallada muerta cuatro días antes en el apartamento de Mogi, pero él había huido. Fue asesinada a golpes en la cabeza y en el cuerpo. Tras una semana huyendo, Loran Guy Mogi fue capturado en un centro para refugiados en la ciudad alemana de Hannover. Desde entonces está detenido a la espera del juicio. Según el fiscal, Robert Beckard, Mogi se ha declarado no culpable de la acusación de asesinato, pero admite que golpeó a Eriksson y que por tanto podría haber provocado su muerte.
18 de agosto: el medio online Avpixlat publicó que un hombre argelino, que llevaba seis años sin vivir en Suecia, tiene derecho a ayuda económica para sufragar consultas médicas y el coste de las medicinas. El hombre había llegado a Suecia en los años 90, pero nunca trabajó ni pagó impuestos allí. Hace seis años regresó a Argelia, pero en abril de este año apareció de repente en Suecia para pedir atención sanitaria de urgencia. Se sometió a dos cirugías a cargo de los contribuyentes, y se consideró con derecho a ayuda económica para costear sus medicinas y varias consultas médicas. La municipalidad de Gotemburgo ha denegado su petición, pero ahora un tribunal administrativo ha dictaminado que, como no dispone de ingresos ni de bienes, tiene derecho a la ayuda.
18 de agosto: cinco representantes de la Iglesia de Suecia escribieron, en un artículo de opinión en el diario sueco Dagens Nyheter, que la iglesia también debería abrirse a los musulmanes. El artículo asombró e indignó a los cristianos. Stefan Gustavsson, secretario general de la Alianza Evangélica Sueca, señaló que el islam, el judaísmo y la cristiandad promueven tres versiones radicalmente diferentes de lo que le sucedió a Jesús:
- Islam: Jesús no murió.
- Judaísmo: Jesús murió, pero no resucitó.
- Cristiandad: Jesús murió y resucitó.
Estas versiones diferentes no pueden ser todas ciertas, dice Gustavsson, e insta a la Iglesia de Suecia a que despierte de su letargo de bella durmiente y empiece a abordar con seriedad los grandes asuntos:
"El relativismo religioso que ahora se ha generalizado en toda la Iglesia de Suecia no solo es un callejón sin salida intelectual, es un insulto a los cristianos de Irak y Siria que se enfrentan a la conversión forzosa y que están dispuestos a dar sus vidas por su fe en Jesucristo".
Pero la Iglesia de Suecia persiste, y el 30 de agosto invitó al imán Mohamad Muslim Eneborg a participar en una misa solemne. Antes de convertirse, el imán se llamaba Åke Daniel Eneborg y era un activista de izquierdas.
24 de agosto: el exmiembro del Parlamento Thoralf Alfsson (Demócratas de Suecia) escribió en su blog que el Servicio de Inmigración había contratado a un mínimo de 1.200 personas durante el año pasado. Antes, en agosto de 2014, el Servicio de Inmigración tenía unos 5.000 empleados; en agosto de 2015 esa cifra era de 6.200 personas. Esto significa que los costes en salarios se han incrementado en 50 millones de coronas (unos 5,9 millones de dólares). En total, el personal del Servicio de Inmigración le cuesta ahora a los contribuyentes suecos 250 millones de coronas (29,6 millones de dólares) al mes, o 3.000 millones de coronas (360 millones de dólares) al año.
Además de haberse disparado los costes, Alfsson se pregunta por qué tantas personas de origen extranjero encuentran trabajo con el Servicio de Inmigración. Escribe: "No puedo evitar preguntarme qué tipo de procesos de selección sigue el Servicio de Inmigración para las personas que contratan. ¿Puede haber empleados con estatus de residente en Suecia que usen una identidad falsa? ¿Hay simpatizantes del ISIS entre los empleados?". Los hay.
La comentarista social y escritora Merit Wager, que publica con frecuencia posts anónimos de empleados del Servicio de Inmigración, escribió el 21 de agosto en su blog que las autoridades ya no aceptan en custodia solicitantes de asilo rechazados, a causa de los ataques de los extremistas de izquierda. Por eso el asesino de Ikea, que ha recibido una orden de deportación, no estaba en custodia, error que llevó a la muerte de dos personas inocentes en el corazón del paraíso sueco. Un empleado del Servicio de Inmigración dijo:
"Hace años, el Servicio de Inmigración era con frecuencia muy criticado por varios grupos izquierdistas que querían 'proteger' a los solicitantes de asilo considerados faltos de razones para la protección y sujetos a la deportación. A veces había grandes manifestaciones y de vez en cuando vandalizaban los edificios del Servicio de Inmigración. Hoy estas acciones han cesado casi por completo. La razón es muy simple: el Servicio de Inmigración ha contratado a los activistas. ¡Ahora son agentes de la autoridad! He conocido a varias personas que hablan muy abiertamente de sus antecedentes en estos grupos activistas. La razón por la que el Servicio de Inmigración los contrata es que en sus CV declaran exactamente lo que el Gobierno quiere oír: que están implicados fogosamente en los asuntos de derechos humanos".
24 de agosto: un furgón de la Policía fue atacado con una granada de mano en el barrio de Tumba, en Estocolmo. Había cuatro policías dentro del vehículo. Si no hubiese sido porque estaba blindado, el incidente podría haber acabado en un baño de sangre. El ataque comenzó cuando varias personas lanzaron piedras a los agentes de policía, y se produjo un incendio en la comisaría local. Momentos después, se arrojó una granada de mano que cayó a un metro y medio del furgón. Nadie resultó herido, pero el vehículo acabó con 105 agujeros por la metralla. A pesar de los intensos esfuerzos de la Policía, aún no se ha capturado a los perpetradores de este intento de asesinato.
25 de agosto: unos políticos locales del pequeño condado sureño de Örkelljunga (10.000 habitantes) escribieron una desesperada carta al Gobierno en la que rogaban ayuda para resolver los problemas creados por la ola de solicitantes de asilo. El Servicio de Inmigración ha habilitado alojamiento en Örkelljunga para unos 250 soliciantes, en apartamentos, en un antiguo motel y en una serie de residencias familiares privadas, incluyendo alojamiento para niños refugiados sin acompañantes. Puede que se habiliten unas 100 unidades adicionales en el Hotel Åsljungagården.
Los políticos locales escribieron en su carta que los índices de criminalidad han ascendido y que se había llamado a la Policía varias veces. Se mencionan violaciones, asaltos y agresiones y robo en comercios, así como el cierre temporal del centro juvenil de Centrumhuset. En el mayor centro de alojamiento, un viejo motel, hay 90 adultos y niños. La mezcla de varios grupos étnicos ha dado lugar a revueltas, amenazas y huelgas de hambre. La carta afirma:
"La situación afecta a cualquiera que viva y esté en nuestro pequeño condado. El ambiente se ha endurecido; muchas personas sienten miedo e inseguridad y con ello surge el riesgo de que aumente la xenofobia, la hostilidad y la exclusión".
El condado fue rápidamente criticado por los principales medios de comunicación, y el 27 de agosto el Servicio de Inmigración anunció que no tenía intención de ayudar a Örkelljunga. El responsable de prensa del Servicio de Inmigración, Fredrik Bengtsson, citado en el diario Helsingborgs Dagblad, estaba especialmente irritado por las críticas del condado a que se mezclaran diferentes grupos:
"Si uno piensa en el sentido de ubicar a los solicitantes de asilo de otra manera, entras en una pendiente resbaladiza. El alojamiento separado para cristianos y musulmanes no es lo que existe en nuestra sociedad. Tenemos libertad de religión, y también se aplica al alojamiento. Hay que pararse un momento y pensarlo, porque no es así como estamos haciendo las cosas en la sociedad".
26 de agosto: los suecos conocieron la noticia de que los políticos de las tres mayores ciudades de la nación quieren ofrecer cursos de "autocuidado y materia sexual" a mendigas gitanas. Estocolmo, Gotemburgo y Malmö solicitan 8,7 millones de coronas (más de 1 millón de dólares) del Fondo Social Europeo para el proyecto, y esperan llegar a 250 mujeres. Irán a clase dos veces por semana, y recibirán alimentos, revisiones médicas gratuitas, artículos sanitarios y de higiene y preservativos gratis. También recibirán una compensación por "pérdida de ingresos laborales". Los políticos locales de los partidos de la oposición en Estocolmo han criticado duramente el proyecto.
28 de agosto: Afrikas Horn, una organización de inmigrantes, informa de otro guerrero sueco del ISIS muerto en combate. El hombre rondaba la treintena y era de origen somalí, pero vivía en el área de Vivalla en Örebro, con mucha concentración de inmigrantes. Era, al parecer, uno de los tres hombres que habían viajado repetidas veces para unirse al ISIS, pero que fueron interceptados dos veces en Turquía y devueltos a Suecia. Es el cuarto residente de Örebro que ha muerto como terrorista del ISIS. El presidente de Afrikas Horn declara al periódico local Nerikes Allehanda que "la familia está de duelo".
28 de agosto: Alí Jodami, que había solicitado asilo a Suecia, fue sentenciado a prisión por estafar a una anciana. Jodami trabajaba en servicio doméstico y estafó a Inga Lill, una mujer de 90 años que padecía demencia, varios millones de coronas. Haciéndose pasar por un amigo de la mujer, Jodami logró controlar sus cuentas bancarias y mudarse a su casa, junto con su familia. Gastó los ahorros de la mujer, dos millones de coronas (unos 240.000 dólares), en artículos de lujo, y también en varios coches. Jodami también logró persuadir a Lill para que le transfiriera su casa –la casa donde vivió de niña, construida por su padre–. Al parecer, la casa tiene un valor de cinco millones de coronas (590.000 dólares). El fraude no se descubrió hasta después de que Jodami enviara a Lill, que no tiene parientes vivos, a un centro geriátrico. La Corte del Distrito sentenció a Jodami a dos años y medio de cárcel y a pagar una multa de 7 millones de coronas (830.000 dólares) más intereses y daños y perjuicios.
28 de agosto: aparecieron dos informes de que los traficantes de personas abandonaron, en un breve periodo de tiempo, a 100 solicitantes de asilo en el área de Gotemburgo. Pernilla Wallin, directora de la unidad de aplicación del Servicio de Inmigración para la Región Occidental, declaró a la televisión pública sueca que jamás pensó que la situación se intensificaría de esta manera, y que las circunstancias son "excepcionales". El Servicio de Inmigración está ahora buscando desesperadamente "contratistas externos que quieran presentar ofertas para alojar temporalmente a los solicitantes de asilo".
Aunque respalda los artículos de Ingrid Carlqvist que ha publicado hasta la fecha, Gatestone Institute ya no está asociado a ella de ningún modo.